La Gran Guerra, con ese nombre era conocida la Primera Guerra Mundial en su momento, se extendió desde 1914 hasta 1918. Hasta ese momento ningún conflicto bélico había alcanzado las dimensiones de ésta, tanto desde el punto de vista geográfico (implicó a países de todo el mundo), como desde el humano (combatieron cerca de 70 millones de soldados).

Europa en 1914


Para entender la Gran Guerra debemos tener en cuenta que previamente al estallido de la misma se habían formado dos bloques de alianzas.

 Por un lado los Imperios Centrales cuyo origen está en la Triple Alianza que firmaron los imperios alemán y austrohúngaro y el Reino de Italia.

Triple Alianza
Países que firmaron la Triple Alianza en 1882
Italia sin embargo no llegó a combatir del lado de los imperios centrales, pero se les unieron el decadente Imperio Otomano y el Reino de Bulgaria.

Aliados de Alemania
Aliados de Alemania durante la I Guerra Mundial

Por otra parte a los firmantes de la Triple Entente Cordiale (Gran Bretaña, Francia e Imperio Ruso) se les unieron países tanto europeos como del resto del mundo, resultando la otra alianza bélica conocida como los Aliados.

Alianzas militares de la I Guerra Mundial
Alianzas militares europeas durante la I Guerra Mundial. En rojo aparecen representados las Potencias Centrales y en azul los Aliados

La Guerra Mundial estalló en Junio de 1914 en Sarajevo (Bosnia), donde asesinaron al heredero al trono austro-húngaro, el archiduque Francisco Fernando.



Este atentado puso en marcha los mecanismos de alianzas y provocó un efecto dominó que llevó a multitud de declaraciones de guerra.


 LA PAZ DE PARÍS (1919-1920)


Acabada la guerra a finales de 1918 se hizo necesaria la organización de la paz. Ésta se elaboró en la Conferencia de Paz de París a la que asistieron treinta y dos países contendientes del bando aliado, aunque la dirección corrió a cargo de Thomas Woodrow Wilson (Estados Unidos), Lloyd Georges (Gran Bretaña), Clemenceau (Francia) y Orlando (Italia). El presidente de los Estados Unidos, Wilson, había elaborado un informe en 1918, conocido como los Catorce Puntos, en el que explicaba cuáles debían ser, a su juicio, las características de esta paz, justicia y respeto para con los países perdedores de la guerra.

Los países perdedores (Imperio Alemán, Imperio Austro-húngaro, Bulgaria e Imperio Otomano) no asistieron a París y tuvieron que aceptar, sin objeciones, las condiciones que allí se establecieron.

La Paz de París se concreta en cinco tratados de paz, uno por cada país perdedor. El primero y más importante fue el Tratado de Versalles, firmado con Alemania en junio de 1919. Las clausulas de este tratado se pueden resumir en lo siguiente:

  • Alemania (y sus aliados) es la única responsable y, por tanto, culpable de la guerra.
  • Alemania debía pagar una millonaria y desorbitada indemnización en concepto de reparaciones de guerra .
  • Reducción del ejército alemán a 100000 hombres, sin artillería, submarinos ni aviación.
  • El imperio colonial alemán desaparece y se reparte entre los vencedores.
  • Alemania ve reducido su territorio con cesiones territoriales a Dinamarca (Schleswig ), Polonia (Posnania y Prusia occidental) y Francia (Alsacia y Lorena), entre otros. Se garantiza el acceso de Polonia al mar a través de corredor de Danzig, que separaba la Prusia oriental del resto de Alemania.
Tratado de Versalles (1919)
Cesiones territoriales que Alemania tuvo que aceptar al terminar la I Guerra Mundial en el Tratado de Versalles (1919)

En septiembre de 1919 se firma el Tratado de Saint-Germain-en-Laye, en el que se especifican las condiciones que imponen los aliados a Autria:

  • Desaparece el Imperio Austro-húngaro.
  • Reducción del territorio austriaco.
  • Aparición de dos nuevos países, Checoslovaquia y el Reino de los Serbios, Croatas y Eslovenos, conocido como Yugoslavia
  • Cesiones territoriales a Italia (Trentino, Tirol Sur, Trieste e Istria) y a Polonia (Galitzia).
  • Austria debe pagar compensaciones de guerra y reducir su ejército a 30000 soldados.
  • Se le prohíbe a Austria cualquier intento de anexión con Alemania.
El Tratado de Trianon (junio de 1920) reconoce la independencia de Hugría y le obliga a aceptar los siguientes términos:
  • Debe ceder territorios a Rumanía (Transilvania), Checoslovaquia y Yugoslavia.
  • Su ejército se reduce a 35000 hombres.
  • Debe pagar una cantidad no especificada como reparaciones de guerra.
Tratados de Saint-Germain (1919) y Trianon (1920)
Los tratados de Saint-Germain y Trianon acabaron con el Imperio Austro-húngaro.

Con Bulgaria se firmó en Noviembre de 1919 el Tratado de Neuilly-sur-Seine que no sólo obligaba a ésta a compensar económicamente a Serbia sino que también limitó su ejército y le obligó a ceder territorios a Rumanía, a la recién creada Yugoslavia e incluso a Grecia.

El Tratado de Sèvres (agosto 1920) supuso el principio del fin del Imperio Otomano. Los artículos del tratado reducen considerablemente el territorio turco hasta relegarlo a la Península de Anatolia y la parte europea de Estambul. Turquía también es obligada a reducir su ejército y a pagar una compensación económica por reparaciones de guerra.

Para evitar que un conflicto de estas dimensiones volviera a asolar el mundo se creó la Sociedad de Naciones, una organización internacional que velaría por el cumplimiento de los acuerdos de París y fomentaría el diálogo entre los países. Su sede se estableció en Ginebra (Suiza) y fracasó al no poder evitar la II Guerra Mundial.

Sesión inaugural de la Sociedad de Naciones (1920)
La Sociedad de Naciones (League of Nation). Sesión de apertura (Noviembre de 1920) en su sede de Ginebra.

La Paz de París supuso la humillación política de Alemania y de sus aliados que mostraron en varias ocasiones su desacuerdo con las duras exigencias. Esto generó un sentimiento revanchista que fue utilizado por el nazismo años después. De la Paz de París se desprende un nuevo mapa de Europa donde los nuevos países (Finlandia, Estonia, Letonia, Lituania, Polonia, Checoslovaquia, Hungría y Yugoslavia) sirvieron de "Cordón sanitario" para mantener a raya el comunismo soviético.

Europa en 1920


CONSECUENCIAS DE LA PRIMERA GUERRA MUNDIAL


Además de las ya mencionadas consecuencias territoriales y políticas, la Primera Guerra Mundial también tuvo un elevado coste en vidas humanas y en daños materiales. Se calcula que murieron cerca de 20 millones de personas y cientos de miles mutilados, inválidos, huérfanos, refugiados o desaparecidos.

La mujer se incorpora al mundo del trabajo al demostrar en la retaguardia de la guerra que son tan capaces como los hombres de desempeñar sus mismos trabajos en las fábricas. Al mismo tiempo surge un empobrecimiento de las clases medias y aparece una nueva figura, la del excombatiente, que tiene dificultades para adaptarse a la vida social.

La destrucción a la que fue sometida gran parte de Europa durante la guerra originó una profunda crisis económica entre 1918 y 1924. Los países europeos tuvieron que endeudarse sobre todo con bancos norteamericanos, lo que supuso que Estados Unidos se convirtiera en la primera potencia mundial.

Durante la guerra se producen importantes innovaciones tecnológicas como los gases tóxicos, los carros de combate y submarinos, el desarrollo de la aviación o la telegrafía sin hilos.

La Paz Armada
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